Supongo que esto funciona así.. No maldigo a la gente que tiene suerte y le va bien en la vida, aunque supongo que tarde o temprano todos y todas nos enfrentamos a ciertos problemas que nos derrumban, o al menos, descoloca un poco.
A estas alturas alturas de mi vida ya he asimilado con cierta frialdad que mi camino en esta vida ha sido, es y será una puta mierda. Así que, mi preocupación no es lo que me vendrá encima; mi preocupación es cómo asimilar lo que aún está por venir.
Comer o no comer. Salir o no salir. Hablar o no hablar. Hacer o no hacer. Ésta soy yo, ahora.
Casi un año (o dos) después.. Pensé que más o menos todo estaba en standby, que tendría un largo tiempo para respirar, reponerme y cambiar mi vida. Y en pleno cambio, justo cuando ya estaba intentando quedarme de pie sin soportes e intentaba dar mis primeros pasos como quien lleva años en una silla de ruedas; justo ahora recibo un empujón que me tira al suelo.
No maldigo a la gente que tiene suerte, no. Les admiro incluso, pero creo que tampoco les envidio. Tienen suerte, de tener suerte. Yo tengo suerte de haber podido llegar hasta aquí. Aunque no sé hasta dónde llegaré.
Quiero querer levantarme.
Eso es todo.
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