Me miró a lo lejos, y aún tardaba en llegar. Al poco tiempo, noté cómo algo me agarraba del pelo y me tiraba de él.
Me di la vuelta, a la vez que una voz gritaba "¡¡¡Tes o pelo moi longo!!!". "Vamos a levar a perruqueira, ten que cortar, ¿verdad?" le decía mi jefa. "¡¡No, no!! ¡Que o ten moi bonito!". Y yo no podía hacer más que reír y mirarla con demasiada ternura.
Y es que hoy ha sido el día del "¡Oh, é un boneco amarelo!", y del "¡Tes o pelo moi longo e moi grande!". Aunque una me preguntó que si yo era la nueva directora.
Ella me trata como si realmente fuese alguien ahí. Y él ya me reconoce, tanto que me llama la atención si paso a su lado y no le digo nada. Y ella me sonríe levantando el bastón riñéndome con su ironía. Y ella siempre tan sonriente. Y ella tan agradable y confiada conmigo. Y ella.. ais, ¡no podía no darte un bikiño al irme!
Ya no quiero ni pensar el poco tiempo que me queda. Ahora forman parte de mi pequeña gran familia. Nunca pensé que se pudiera recibir tanto afecto y cariño :$ Pero sé que yo les extrañaré más a ellos, demasiado..
Mientras.. cada día les dedicaré todas las sonrisas de mis mañanas, porque lo merecen, porque quiero, y porque lo necesito, yo más que ellos.
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