Tres horas y media de tren,
aproximadamente.
Durante ese rato, tres horas y
media, me habría dado tiempo a ir desde casa hasta Las Tablas, de allí hasta
Alcorcón y comer, y luego volver a casa, sin haber trabajado.
Durante esas tres horas y media
me da tiempo a escuchar tres veces todas las canciones de Boza, incluso
repitiendo varias, y no cansarme.
En esas tres horas y media, puedo
hacer mi jornada laboral completa, incluyendo el tiempo de comida, o media hora
más con mis niños.
Mientras que pasan tres horas y
media, puedo ver dos películas, con tiempo a llorar y/o quejarme sobre alguna
de ellas. Y también a ver 10 capítulos, o 5, depende de la serie.
En un rato de tres horas y media
puedo soñar tres cosas distintas, si tengo que levantarme a abrirle la puerta
al gatis.
En tres horas y media puedo poner
dos lavadoras y tenderlas. Y limpiar, y ducharme
mientras están puestas.
Durante tres horas y media, puedo
pensarte 109 veces, echarte de menos 10 veces más, y recordar tu olor y el
tacto de tu piel 9 veces más.
En tres horas y media puedo recorrerme medio país para volver a casa.